Muchos sabíamos que la llegada de Sergio Pérez al equipo de Petter Sauber no se iba a quedar en tan solo un fichaje más. El dinero proveniente de la marca de telefonía, Telmex, tan solo era el principio de lo que se puede convertir en un buen negocio para la escudería. Sobre todo tras conocer que más empresas de ese país están deseando ocupar una parte del Sauber de esta temporada.
El equipo de Hinwill comienza así un año muy diferente a lo que se convirtió 2010, con un monoplaza vestido de un color blanco impoluto que no nos hacia presagiar nada bueno para los intereses de Pedro de la Rosa, y por tanto, para sus aficionados. Ahora con Sergio Pérez y Kamui Kobayashi promete tener más facilidades para desarrollar el nuevo C31.
Vía | Autosport.pt
