Corría 1997 cuando el fotógrafo de F1 Racing, Darren Heath, se dio cuenta durante el Gran Premio de Austria que los McLaren MP4-12 de Mika Hakkinen y David Coulthard llevaban los discos traseros al rojo vivo en zonas de aceleración, y ahí empezó su cruzada particular para descubrir lo que según él era algún sistema mecánico que daba ventaja a los monoplazas plateados.
Fue en el Gran Premio de Luxemburgo de ese mismo año cuando el trabajo de Heath culminó en una foto que dio la vuelta al mundo (por desgracia, no la he encontrado por internet): en el interior del cockpit del MP4-12 de Hakkinen, había tres pedales. Acelerador, freno, y un tercer pedal que permitía accionar el freno sólo en una de las dos ruedas traseras (seleccionada por el piloto en el volante), para facilitar el comportamiento del monoplaza en las curvas, evitando subvirajes y actuando como una asistencia a la dirección.
El escándalo se destapó en la temporada 1998, tras la escandalosa superioridad mostrada por los dos McLaren en la carrera inaugural en Australia, y los cruces de denuncias no tardaron en llegar (Williams y Jordan también usaban un sistema similar). La realmente importante es la que Ferrari presentó contra McLaren por lo que consideraban una violación del reglamento, mientras en McLaren no se cansaban de asegurar que ese pedal no era el que marcaba la diferencia.
En cualquier caso, la FIA prohibió el sistema para la carrera del segundo Gran Premio del año, en Brasil, y el resultado de la carrera volvió a ser un insultante doblete de McLaren, con Michael Schumacher entrando tercero a un minuto de los MP4-12 de dos pedales. El Mundial fue una exhibición de las flechas de plata, y se lo llevó Mika Hakkinen.
Moraleja: a veces, cuando las cosas van muy bien para unos y muy mal para otros, se intenta buscar la excusa que sea en los que ganan para que parezca que lo hacen de manera ilícita. Ha pasado siempre en la historia de la Fórmula 1 (recordemos, sin ir demasiado lejos, el caso del mass dumper). De ese modo, tomemos lo de las levas misteriosas en el volante de McLaren como una curiosidad. Si salieran más pruebas, ya seguiremos dándole vueltas al asunto.