El equipo Renault de Fórmula 1 ha sufrido una reestructuración total durante el invierno. Para empezar, lo que antes se conocía como Renault F1 no existe, e incluso se puede discutir que el equipo actual sea realmente Renault, dado que realmente el equipo es propiedad de Genii Capital y el empresario Gerard Lopez, quien decidió mantener el nombre del equipo de Fórmula 1. Es importante remarcar el fichaje de Eric Boullier como nuevo jefe de equipo.
Durante 2009, el equipo Renault sufrió todo tipo de problemas. El final de temporada de 2008 había sido muy prometedor, con muy buen rendimiento y dos victorias (aún cuando una de ellas se vió completamente manchada por el crashgate. Por esta razón, 2009 tenía que ser el año de la vuelta a la lucha por el título junto con Fernando Alonso.
Ni se acercaron a ello. Durante la pretemporada, el coche no pasó los crash test de la FIA y su frontal tuvo que ser rediseñado. Esto, junto a la larga historia del doble difusor, dejó a Renault con un R29 muy flojo. La Pole Position de Hungría y el podio de Singapur fueron los puntos álgidos de una temporada con una gran cantidad de decepciones. El rendimiento de Piquet, su despido del equipo, el propio crashgate, el pobre rendimiento (aunque por otro lado, esperable) de Romain Grosjean, la marcha de ING del equipo… en definitiva, un final de temporada que poco tuvo que ver con el de 2008.
Hablar de un retorno de Renault a sus orígenes no deja de ser una ironía. A pesar de los colores y el centralizar más sus operaciones en Francia, hechos que evocan sus primeras épocas en la Fórmula 1, todo lo demás tiene un sabor distinto. Renault está poco implicada, no hay pilotos franceses (los hubo siempre, de 1977 a 1985) a bordo, y a priori no es un equipo de cabeza. De todas formas, en Renault parece que quieren partir desde cero, y eso les honra, después de todo lo sucedido con Briatore. El Renault R30, al que muchos vimos un enorme parecido con su predecesor, ha ido evolucionando durante las pruebas invernales, hasta el punto que poco tiene que ver el R30 que vimos en Cheste con el que vimos en Montmeló.
Su primer piloto, Robert Kubica, apenas necesita introducción. En su quinto año (cuarto completo) en la Fórmula 1, el polaco es uno de los pilotos considerados más completos de la parrilla. Sus resultados con BMW-Sauber le avalan, especialmente el 2008, cuando estuvo en liza por el campeonato, incluso con opciones matemáticas a dos carreras del final. Está claro que el cambio de BMW por Renault significa que va a tener que adaptarse a una nueva forma de trabajo. Robert destaca sobretodo en carrera, con un ritmo siempre muy constante. Tiene grandes carreras, aunque si el coche no funciona como es debido, a veces se pierde por la parte baja del pelotón.
El segundo piloto del equipo en 2010 será el debutante Vitaly Petrov. El ruso llega a la Fórmula 1 después de un sólido año que le ha dado el subcampeonato de la GP2. A pesar de su rendimiento, presumiblemente ha sido el dinero, los sponsors, quienes le han obtenido el puesto en Renault a Petrov. Es gracias a él, que Lada tendrá sus logos en los monoplazas amarillos. De Petrov como piloto de Fórmula 1 se puede decir muy poco, o más bien nada, aunque se ha dedicado toda la pretemporada a preparar stints largos, así que es previsible que sufra más durante las clasificaciones que durante las carreras, aunque 2010 debería ser un año de aprendizaje para él.
En definitiva, la pareja de pilotos de Renault no es de las más fuertes en la parrilla, pero las ganas de Petrov y la habilidad de Kubica son ingredientes más que suficientes para hacer funcionar al Renault R30. Esta pareja de pilotos de Europa del este pueden ser geniales en ocasiones, como se ha visto en la Fórmula 1 en el caso del polaco y en la GP2 en el caso del ruso.
Siguiendo la presentación del R30, mucha gente lo consideraba como un pobre esfuerzo por parte de Renault de recuperar en nivel, dado su gran parecido con el coche del año pasado, pero a medida que han avanzado los test, el coche ha ido evolucionando, tanto a nivel estético como a nivel de rendimiento. Renault juega la baza de un motor que consume poco y tiene a castigar poco a los neumáticos, aunque eso también dependerá del chasis. Este coche se ha diseñado pensando en las carreras del domingo, sabiendo que es donde y cuando se juegan los puntos. Si la táctica les va a ir bien o no, eso lo empezaremos a ver en menos de una semana. En mi opinión, Renault va a funcionar mejor de lo que parecía hace apenas un mes.
Un punto clave, además del motor y su poco consumo, va a ser el alerón trasero, que juega con formas curvadas. Esto es algo poco convencional en la Fórmula 1, y podría ser que ello les ayudara un poco en su proceso de lenta recuperación hacia el grupo de cabeza. En general, Renault ha tenido tendencia a fabricar alerones traseros bastante revolucionarios, algunos con mayor éxito que otros. En mi opinión, el equipo francés (o de Luxemburgo, según se mire) estará este año luchando por los puntos. Habrá que ver con qué regularidad y, sobretodo, cómo acaban el año, puesto que creo que Renault tiene las vista puesta en el futuro, y no solo en el 2010.
Para resumir un poco, Renault plantea el 2010 como una temporada para resarcirse, reordenar un equipo que se había visto sumido en un terrible caos que ni la presencia del bicampeón Fernando Alonso podía solucionar. Ejemplo de ello es el fichaje de Boullier, o el retorno a los colores de fábrica de Renault, para alejarse de todo lo que representan los colores naranja, amarillo y blanco. Es una buena manera de enfocar la temporada, siempre y cuando no se olviden que, además de un ejercicio mediático de limpieza de imagen, también forman parte de un campeonato del mundo de carreras de coches del más alto nivel. Por mi parte, espero que estén a la altura de las circunstancias y puedan, al menos, alejarse de la alargada sombra de Flavio Briatore.
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