Entramos en la recta final del Campeonato Mundial de Rallyes. Tan solo restan tres rallyes para dar por finiquitada la temporada de lo que será previsiblemente el séptimo titulo de Campeón para Sébastien Loeb. El alsaciano estará más en casa que nunca, por lo que intentará por encima de cualquier cosa ganar en un asfalto que conoce como la palma de su mano.
La verdad es que precisamente eso es lo que parece que tenía en su mente el primer piloto de Citroën durante la disputa del Rally de Japón. Loeb en ningún momento quiso correr muchos riesgos e intentó terminar el rally con la máxima cosecha de puntos posible. Así, todo queda para descorchar el champan del alirón en la nación patria del piloto y de la marca que están dominando el Mundial. Todo ello con su consiguiente mayor difusión ante el publico general.
En cuanto al rally en sí, pues poco que decir ya que es su primera inclusión en el calendario del WRC. Aunque por lo que he podido observar en algunos videos, que andan colgados por la red, se trata también de asfalto muy viejo pero con carreteras más anchas que el mítico Tour de Corse. Además de que los recorridos rodeados por acantilados dejan de caracterizar la prueba francesa tal y como lo hacia la antigua prueba corsica.
En cuanto a la meteorología se esperan días muy nublados con lluvias durante el sábado y el domingo. Esto unido al asfalto viejo, con poca capacidad de drenaje, puede dejar los tramos como una pista de patinaje en el caso de equivocarte en la monta de neumáticos. Algo parecido a lo que pasó el ultimo fin de semana en el Rally de San Remo.
El principal favorito ya lo he dicho antes. Sébastien Loeb lleva en la frente escrita la palabra victoria, por lo que será muy difícil arrebatarle la primera plaza a no ser que cometa un error o que tenga algún problema mecánico. El segundo de la quiniela es Dani Sordo. Los resultados cosechados en Bulgaria y Alemania demuestran que actualmente el español es el segundo más rápido sobre esta superficie.
El nombre de Petter Solberg es el siguiente de la lista. El nórdico nunca ha sido un especialista, pero este año con el C4 WRC está realizando muy buenas actuaciones en asfalto. Después de estos tres hombres encontramos a un pequeño grupo donde encontramos a los dos Ford oficiales y a Sébastien Ogier. Ellos lucharán por las migajas, cuarto, quinto y sexto, o por alguna posición de podio en el caso de que los de cabeza “pinchen”.
En cuanto a la situación de los campeonatos poco hay que decir. Seb solo necesita ganar para proclamarse matemáticamente campeón del Mundo por séptima vez consecutiva. Viendo los ritmos de Ogier y de Latvala es casi imposible que alguno de los dos siga con posibilidades después de Alsacia. En el de marcas todo parece indicar que el posible doblete de Citroën en los dos próximos rallyes terminará por sentenciar el titulo a favor de los galos.
