Debutó el pasado año y tras los buenos resultados, en Porsche tienen claro que la tecnología híbrida es el camino a seguir en las carreras de resistencia. Por ello, en 2011, Porsche ha presentado el Porsche 911 GT3 R Hybrid en versión 2.0. Un modelo totalmente revisado y que muchos pensamos que es el laboratorio en el que Porsche prepara su futuro desembarco en la máxima categoría de las 24 horas de Le Mans.
La principal característica del Porsche 911 GT3 R Hybrid, su KERS de basado en un volante de inercia (girando a más de 40.000 rpm) y desarrollado por Williams Hybrid Power, continúa siendo el mismo, pero gracias a la utilización de la fibra de carbono han conseguido reducir su peso en un 20%. Este punto ha sido importante en el desarrollo del modelo de 2011 ya que el peso total del conjunto ha descendido hasta los 1.300 kilogramos (1.350 en el modelo de 2010).
La energía almacenada en el KERS se transmite a las dos ruedas delanteras mediante dos motores eléctricos que entregan 75 kW (unos 100 CV) a cada uno de ellas, 15 kw más que en la versión 1.0. Para hacer uso de ese incremento de potencia los pilotos pueden activar el KERS de dos formas: mediante un botón en el volante o por el sistema de kickdown (recorrido extra del pedal del acelerador).
En la parte de combustión, el motor boxer de 6 cilindros ha visto reducida su potencia hasta los 465 CV. La razón es sencilla, en Porsche buscan una mejor relación entre consumo y potencia ya que el objetivo del 911 GT3 R Hybrid 2.0 es conseguir los mismos tiempos que en 2010 pero con menos consumo. Por último, y para facilitar la tarea al piloto, buena parte de los controles y displays se ha concentrado en el volante. Como en 2010, el VLN será el banco de pruebas y las 24 horas de Nürburgring su prueba de fuego aunque no descartemos verle en otras grandes citas como la Intercontinental Le Mans Cup.
