El proveedor italiano está empleando los parches que funcionan como sensores de temperatura y de presión. A través de tales dispositivos, se pueden realizar seguimientos en tiempo real de los parámetros de uso de cada neumático. Los parchos o pegatinas tienen la capacidad de indicar la temperatura máxima alcanzada por la banda de rodamiento, incluso si el neumático está siendo pre-calentado mediante las mantas térmicas que emplean las escuderías.
La FIA también se beneficiará de tal aplicación porque podrá constatar que todos los equipos mantengan sus neumáticos con la presión y la temperatura acordada, según la normativa, antes de ser utilizados en la pista. Se supone que con tales termómetros en acción, las recomendaciones de Pirelli, en cuanto al rendimiento óptimo de sus compuestos, serán más efectivas, evitando con ello la improvisación que se observó el año pasado.
Vía | motorsport