Hace unas semanas os hablábamos por primera vez de la posibilidad de que Carlos Sainz disputara la próxima edición del Dakar al volante de un buggy de SMG. Las palabras del director de equipo, Philippe Gache, daba prácticamente por oficial que el madrileño estaría con ellos en unos test en Marruecos a principios de octubre para seguir desarrollando el 4x2 que ya tuvo un gran rendimiento durante la carrera de este año.
Nuestros compañeros de el4x4.com han pillado a Carlos Sainz durante estos test realizados en el sur de Marruecos, confirmando gran parte de nuestras sospechas anteriores. Como podéis observar en la fotografía superior, el ganador del Dakar de 2010 cuenta de nuevo con el apoyo de Red Bull en su proyecto y lucirá sus colores al igual que lo hará Nasser Al-Attiyah junto a Lucas Cruz en su nuevo buggy.
El bicampéon del Mundo de Rallyes es todo un experto probador y desarrollador. Desde sus inicios en Toyota a principios de la década de los noventa, Sainz ha participado en multitud de proyectos ayudando a poner a punto elementos tan importantes como las suspensiones u obtener un correcto reparto de pesos. Como bien dicen los chicos de el4x4.com, las suspensiones será una de las principales ventajas de este 4x2, sumado al hecho de poder inflar y desinflar los neumáticos desde el interior (para zona de dunas es necesario bajar la presión) y una mejor relación peso/potencia que por ejemplo los Mini de X-Raid.
El motor sigue siendo un V8 de seis litros colocado en posición central y con dos grandes radiadores que al contrario que en el proyecto anterior de Sainz, no suelen dar ningún problema. Las ruedas de depuesto seguirán colocadas en la parte trasera del coche, al contrario que en el buggy de Nasser que van situadas en los laterales. Este tipo de modelos, a los que podríamos llamar tipo “Schlesser”, se caracterizan por su agilidad y capacidad de absorber cualquier irregularidad en secciones rápidas. Algo que será muy importante en el Dakar 2014 ya que contará con mucho terreno de rally.
La aerodinámica en este tipo de coches es tal vez mejor que en los 4x4, pero aun así sigue sin ser lo más importante, teniendo siempre en mente un diseño que permita un “vuelo” estable del coche. El principal contra (además de no contar con tracción total) será el poco espacio del cockpit, dónde ni tan siquiera cabe un segundo GPS, además de la escasa visibilidad a la hora de “surfear” las dunas.
Vía y fotos | el4x4.com (Gracias Nacho Salvador)