Durante el Gran Premio de Hungría celebrado en la jornada de ayer, Pastor Maldonado recibió la undécima sanción de la temporada. Como viene ocurriendo en los últimos grandes premios, la sanción vino precedida por un incidente en la pista cuando el venezolano trataba de superar al Force India de Paul Di Resta. Maldonado optó por meter el monoplaza por el interior pero no pudo evitar el indicente. Tras lo ocurrido en el Gran Premio de Gran Bretaña con Sergio Perez ya sabíamos que el de Maracay no iba a cambiar su estilo, y a las primeras de cambio tenemos una muestra.
Pocos instantes después se anunciaba que los comisarios, más aburridos que en otros grandes premios, iban a estudiar la situación. El resultado, una sanción más para el ya largo historial de Pastor Maldondado. Pero para Maldonado lo ocurrido ayer fue un incidente más de carrera que podría compararse con el mano a mano que Kimi Raikkonen y Romain Grosjean tuvieron en la curva 1. El piloto de Williams ha reconocido que el impacto contra el monoplaza de Paul Di Resta se debió a tener que corregir la trayectoria cuando su coche derrapaba. Maldonado no considera el pequeño golpe suficiente como para recibir una sanción tan dura.
Desde Williams, en voz de su ingeniero jefe de operaciones, Mark Gillan, también consideran excesiva la sanción a su piloto. Para la escudería, el hueco dejado por el piloto de Force India fue más que suficiente como para que Maldonado pudiese intentar el adelatamiento. Los comisarios no lo entendieron así y la sanción le costó a Pastor Maldonado luchar por el décimo puesto, y por un punto.
Vía | Autosport
