El primer damnificado de los entrenamientos libres de ayer en La Sarthe ha sido el Lola-Mazda Kruse Schiller Motorsport. El LMP2 destaba disputando los últimos minutos de la sesión de clasificación con el japonés Hideki Noda al volante, cuando, segúna las informaciones, pisó una mancha de aceite provocada por el Aston Martin DBR9 de Team Modena, perdiendo el control y comenzando el vuelo tan característico de estos prototipos. El coche no quedó en demasiado buen estado y a pesar de que el motor parece que salió ileso llegar al sábado pinta complicado.
No es la primera vez que un Lola-Mazda sufre un grave accidente. En las 12 horas de Sebring el equipo Devlin sufrió otro espectacular accidente. A este hemos de sumarle otros vuelos de los últimos tiempos. El de Marc Gené hace dos semanas, o el de Stéphane Ortelli en la prueba de las Le Mans Series disputadas en Monza. Estos accidentes, y el peligro que conllevan estos "vuelos" está haciendo recapacitar al ACO sobre las prestaciones de estos coches y sobre la seguridad. En el futuro, a muy corto plazo, es posible que se tomen medidas al respecto.
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