La Fórmula 1 ha vivido hoy durante el Gran Premio de Gran Bretaña su enésima polémica con los neumáticos Pirelli que han vuelto, y volverán a serlo en los próximos días protagonistas.
Lewis Hamilton, que aprovechaba la salida para tomar la delantera de manera cómoda, sufría un pinchazo que le mandaba al fondo del pelotón. Sería el primero de muchos que convertirían la carrera en un pequeño caos.
No pasaban ni un puñado de vueltas cuando en las curvas cuatro y cinco, en la nueva sección de Silverstone, los pinchazos se sucedían y provocaban la salida del safety car con objeto de limpiar la pista. Eran muchos los que, en esos momentos, decidían cambiar su neumáticos y evitar problemas mayores.
Tras ese primer safety-car, Sebastián Vettel ponía tierra de por medio con sus perseguidores y todo parecía indicar que la victoria era suya. 25puntos, sumados a la mal carrera, en esos momentos, de Alonso y Raikkonen le ponían el título casi en bandeja.
Pero cosas del destino, hoy la suerte ha abandonado a Vettel y tras realizar su segunda parada su caja de cambios decía adiós provocando la salida del segundo safety-car. Con 20 vueltas por delante teníamos una nueva carrera.
En esa mini carrera, Nico Rosberg ha sabido aprovechar el regalo para hacerse con la segunda victoria de la temporada. Mark Webber que ha ido de menos, en la salida un toque de Romain Grosjean le ha hecho perder 11 posiciones,a más se ha hecho con la segunda posición.
Fernando Alonso ha vivido una carrera tipo montaña rusa. En la salida no conseguía hacer su magia y no sería hasta mediada la carrera cuando se ponía en disposición de arreglar el desaguisado de ayer. Pero en un final de carrera magnífico, Alonso ha logrado ir ascendiendo posiciones hasta lograr el podio.
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