Pilotar en un óvalo puede parecer sencillo pero hacerlo bien es un "arte" para el que únicamente los norteamericanos parecen estar preparados. Quizás en Estados Unidos no guste, pero en los últimos años los pilotos de fuera son cada vez más. Marcos Ambrose, Juan Pablo Montoya, Germán Quiroga y uno de los últimos en llegar, Nelson Piquet Jr, son los mejores ejemplos. Aunque ello no equivalga a éxito ya que en el caso de Ambrose o Montoya su periodo de adaptación ha sido más largo.
Pero para ser piloto de la NASCAR, además de pilotar bien tienes que tener otras cualidades. Entre ellas, adaptarte a la bronca, las peleas, los estúpidos piques en pista. Algo que Nelsinho Piquet ha descubierto el pasado fin de semana con motivo de la cita de la NASCAR Nationwide Series en Richmond. El piloto brasileño se las tuvo tiesas con Brian Scott y tras liarse a tortas al bajarse de los coches, sus mecánicos (el séquito que vela por el piloto y por su coche) siguió con la "fiesta" en el paddock. Tal fue la bronca varios de los mecánicos fueron detenidos...