Malas noticias de nuevo para los españoles en el Dakar. Si ayer era Carlos Sainz el que se veía obligado a abandonar por accidente, hoy es el único representante de Mitsubishi, Nani Roma quien tenía que abandonar por problemas técnicos en su Racing Lancer.
Durante el transcurso de la etapa de hoy que todavía se está disputando, desde Fiambalá a La Rioja, en el kilómetro 165 de los 225 que componen la especial, el Mitsubishi Racing Lancer se paraba. En ese momento iban en tercera posición, con Robby Gordon por detrás muy cerca presionando. Con la retirada de Nani Roma se terminan las aspiraciones de victoria o podio final para los españoles en este Rally Dakar Argentina-Chile, al menos en lo que a la categoría de coches se refiere. Mala suerte, y otra vez será la revancha.
Vía | Nota de prensa de Repsol
Bueno, pues esta será recordada como el gran gazapo de Alexuny como editor novato de Racingpasión. Os cito textualmente el texto que me llevó a liarla en la nota de prensa de Repsol:
El piloto y copiloto del Team Repsol Mitsubishi Ralliart, Nani Roma y Lucas Cruz, han perdido cualquier opción de podio en el Dakar 2009, después de que el coche se les parara por problemas técnicos 165 Km. después del inicio de la especial, que unía Fiambalá y La Rioja y constaba de 220 km. Los pilotos del único turbodiesel de Mitsubishi superviviente estaban siendo sometidos a una gran presión por parte del estadounidense Robbie Gordon, que pretendía hacerse con la posición de podio que ocupaban los españoles, tras el abandono del hasta entonces líder de la general, Carlos Sainz, que había sufrido un aparatoso accidente. El propio Roma estuvo a punto de salirse en el mismo punto que Sainz y, aunque pudo evitarlo, el coche se le paró 86 Km. más adelante con problemas técnicos.
El gran fallo por mi parte: leer que a Roma se le paraba el coche tras dos párrafos que llevan a pensar precisamente en negativo. Por lo que entendí que tuvo que abandonar.
Mis más sinceras disculpas si a alguno le hice comenzar la tarde con un disgusto.
Lección aprendida. ¿Alguien se ofrece a empuñar el gato de nueve colas?
