La tensión vivida durante la última semana se notaba ayer en la cara de Nani Roma. El español había sufrido para conseguir su segundo Dakar, el primero en la categoría de coches, pero más le había dolido el comportamiento de su compañero de equipo y la prensa ante el tema de las órdenes de equipo. 10 años después de lograrlo al manillar de la KTM, el de Folgueroles hacia historia al volante de uno de los Mini de X-Raid, equipo del que será la punta de lanza sin discusiones en 2015.
Y es que tras las últimas declaraciones realizadas por Nani a la agencia EFE, ahora sabemos que los rumores que sitúan a Stéphane Peterhansel fuera del equipo son ciertos (TV3 ya dijo que el pasado viernes por la noche rompió su contrato con Sven Quandt), algo que obviamente lo pone en el punto de mira del supuesto proyecto de Peugeot para su regreso al Rally-Raid más duro del planeta. Precisamente, la salida de Monsieur Dakar del equipo tras la edición de este año, parece que ha sido la verdadera razón para ese despiadado ataque de la penúltima etapa.
El primero que ha intentado restar mérito a mí victoria ha sido Peterhansel y luego la prensa en general. A Peterhansel le fastidia que lo haya ganado, por eso hizo todas las declaraciones. Es un 'killer', le jode mucho perder, y fue el que lo empezó todo. Pero estoy tan contento de lo que hemos hecho, que nada puede cambiarlo. Hay que mirar los resultados: he sido líder 8 días, he ganado dos etapas y el tercero ha quedado a casi una hora. Peterhansel se va a ir del equipo este año y por eso ha atacado así, ya me dijo que o me pasaba o lo rompía todo, no quería ser segundo. Pero dentro de unos días nadie se acordará de esto. Estas cosas quedan allí y ya está. Yo le he dicho lo que pensaba.
Además el año que viene él se va, cambia de equipo y nos las veremos desde otro lado. Lo que sucede es que Peterhansel nunca había tenido esta sensación en un equipo, siempre era el líder. En Mitsubishi había órdenes para que él ganara. En Mini tuvo los dos últimos dos Dakar cómodos y ahora se ha encontrado con mi competencia y su reacción no ha sido buena.
Palabras que desde luego contrastan con las imágenes de ambos abrazados o las declaraciones de Peterhansel antes de comenzar la aventura, asegurando que si no ganaba el Dakar él, le gustaría que lo hiciera Nani Roma, siguiendo los pasos de Auriol y el propio Peterhansel al ganar en dos y cuatro ruedas. A su vez, el ganador de las ediciones 2004 y 2014 ha querido arrojar algo de luz sobre lo que ha ocurrido con las polémicas ordenes de equipo este año, que a la postre han terminado por beneficiar a un Roma que había realizado posiblemente una de sus mejores primera semanas que se le recuerde.
Lo que se dijo es que se bajara el ritmo, porque mi jefe podría haber parado la carrera hace cuatro días antes del final. Otro manager con menos pasión por las carreras la hubiera detenido antes, no se hubiera arriesgado a dejar tres coches en el desierto. Si en la etapa 11 llegamos a salir fuerte y nos quedamos los tres Mini tirados, la pregunta que todo el mundo le haría a mi jefe es: “¿tú eres tonto?”
Y en Múnich los de BMW y Mini harían lo mismo. El jefe se ha arriesgado y ha dejado tirar hasta que antes de la última etapa dijo que se paraba el rally, porque si en la última etapa hubiésemos salido a la guerra no sé como hubiera terminado. Lo importante es ganar. Hemos hecho tan bien las cosas estos días que no me importa haber ganado de esta manera.
Vía | Marca
