Podemos decir, sin miedo a equivocarnos, que el regreso de Michael Schumacher a la Fórmula 1 está más cerca de la pesadilla que del sueño. Los dos últimos grandes premios han sido el mejor ejemplo de ello. El Kaiser era incapaz de meterse en la Q3 y, abandonos aparte, durante la carrera del Gran Premio de Europa, Schumacher consiguió su peor resultado en las más de 250 carreras disputadas en la Fórmula 1.
El alemán sigue buscando las consecuencias de tan pobres prestaciones y parece que siguen siendo las mismas que durante toda la temporada. Michael Schumacher aún no sabe sacarle todo el partido a los neumáticos, algo que se agrava durante la calificación, en la que tiene graves problemas para conseguir que las gomas lleguen a la temperatura adecuada. Algo que no sucede en carrera, aunque llegados a ese punto, se ven lastrados por salir muy atrás en la parrilla.
En Valencia, Mercedes GP presentó un nuevo pack de mejoras que no dieron sus resultados. En palabras de Ross Brawn, las mejoras no serán palpables hasta las próximas carreras, aunque son realistas, y tras lo visto en el Valencia Street Circuit, admiten que Silverstone, es una incógnita.
Vía | ESPN F1