Nueva vuelta de tuerca más al culebrón Lewis Hamilton. Eddie Jordan tiró la piedra y ahora buena parte de la rumorología del paddock se centra en el futuro del británico. McLaren no quiere dar por perdido a su piloto franquicia y estaría dispuesta a igualar la oferta que Mercedes AMG le podría haber ofrecido y que asciende hasta las 11,5 millones de libras por temporada. Salvando las distancia, lo que en otros deportes se conoce como derecho de tanteo.
Más allá de lo jugosa de la oferta, que Hamilton se decida por una u otra escudería podría ser cuestión de pequeños detalles. Ahora mismo, los derechos de imagen de Hamilton están limitados por los contratos que McLaren tiene firmados con diversos patrocinadores. De forma que el británico no puede lucir un reloj que no sea Tag Heuer o vestir un traje distinto a Hugo Boss. El dinero que podría ganar con estos pequeños contratos es el extra que ofrece Mercedes AMG, mucho más laxa.
El punto de optimismo para McLaren vendría definido por uno de esos contratos personales de Lewis Hamilton. Ahora mismo el inglés es imagen de Reebok lo que no provoca ningún tipo de conflicto. Incluso la escudería británica podría flexibilizar sus peticiones si con ello consigue retener a Hamilton. Seguro que otro de los puntos a tratar sería la propiedad de los trofeos que habitualmente se quedan en la sede de Woking.
Pero todo esto podría quedar en agua de borrajas. En Mercedes AMG están replanteándose su organización de cara al futuro en la máxima categoría y el control de gastos es un punto de capital importancia. De momento, y con el nuevo Pacto de la Concordia sobre la mesa, veremos a Mercedes-Benz en la máxima categoría hasta 2020 pero eso no quita para que haya profundos cambios en la estructura interna, incluida la posible presencia de Niki Lauda vestido de gris plata.
Vía | Autosport
