Semana complicada la que ha vivido Luca Cordero Di Montezemolo. Para comenzar, el Presidente de Ferrari ha tenido que superar el mal trago, aunque aún no sea oficial, de que el piloto que más gloria ha dado a la Scuderia esté coqueteando con su vuelta a la Fórmula 1 y no con ellos.
Durante buena parte de la temporada, Ferrari ha defendido que lo ideal para la Fórmula 1 sería contar con tres monoplazas por escudería, estando su tercer monoplaza reservado para Michael Schumacher. Ahora que el Kaiser se pueda marchar a Mercedes GP suena como puñalada en la espalda de Di Montezemolo.
El segundo fuego del italiano han sido las declaraciones de Kimi Raikkonen afirmando que fue el Banco Santander quien le echó de Ferrari, para hacer hueco a Fernando Alonso, y no la propia Ferrari quien se deshizo de el. Cordero Di Montezemolo ha respondido al finés diciendo que Ferrari jamás ha dejado que sus patrocinadores tomen las decisiones sobre que piloto subir a sus monoplazas. Dejando claro que han sido ellos quienes le han despedido.
La relación entre Raikkonen y la escudería italiana era muy fría, algo que esperan que cambie con el asturiano. Aunque a tenor de las últimas declaraciones del presidente no todo marcha a las mil maravillas como podría pensarse. El italiano ha advertido al Fernando Alonso que en Ferrari tendrá que ser una parte más del equipo e incluso le ha aconsejado que si quiere ir por su cuenta, que cree el suyo como hizo John Surtees.
Si vienes a pilotar para nosotros, pilotarás para un equipo, para un grupo, no conducirás para ti mismo
Parece que nos hemos perdido algo, porque sino, no entiendo a cuento de que vienen estas declaraciones.
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