El incidente entre Kimi Raikkonen y Sergio Perez casi tira por tierra todas las opciones de un gran resultado del finés. Finalmente, y a pesar de ver como Lewis Hamilton se acercaba en los últimos compases, Raikkonen pudo atar una segunda posición. Un resultado que el piloto debería agradecer a su escudería, Lotus.
Tras la carrera, Raikkonen ha reconocido que pidió al equipo cambiar el frontal de su monoplaza y que no sabe porque no se realizó el cambio. De haberse producido, y viendo lo cerca que han terminado Hamilton y Vettel, el piloto podría haber descendido hasta la cuarta posición.
El propio Kimi Raikkonen ha reconocido que los daños en el alerón delantero hicieron que empeorara la conducción del E21, principalmente produciendo subviraje, aunque que no lo suficiente como para justificar un cambio y la perdida de tiempo asociada. Con estos problemas, Iceman afirma que era imposible mantener un ritmo de carrera más alto.
Por último, el piloto de Lotus ha aprovechado para echar la culpa del incidente a Sergio Perez al que acusa de mandarle fuera de la pista cuando trataba de adelantarle.
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