Continuamos con el repaso a las categorías más importantes del mundo de automovilismo. En este caso hablaremos del Mundial de Rallyes y en concreto de todo lo positivo que ha acontecido la temporada 2009. Lo que esta claro es que la podríamos destacar como una de las más emocionantes ya que hasta el último momento no se supo su ganador. Sébastien Loeb debía remontar tras sus errores en Polonia y Grecia, mientras que Mikko trataba por todos los medios de contener sus ataques.
Finalmente el francés, en otra muestra de su frialdad y saber hacer, se llevaba el campeonato absoluto por tan solo un punto de diferencia. Uno más para su colección. También habría que felicitar a Hirvonen por su gran actuación, demostrando año tras año que se encuentra un poco más cerca de Loeb y por tanto más cerca de lo que significaría su primer titulo Mundial. A Dani Sordo por su parte también le ha llegado la consolidación y tranquilidad necesaria. Tras 2008, un año de luces y sombras, plagado de problemas mecánicos, en la que su moral quedó muy tocada a pesar de los buenos resultados, ha llegado su confirmación como el tercero en discordia. El español ha seguido demostrándose rapidísimo en asfalto, llegando incluso a superar a Loeb en casa, y mostrando una gran mejoría en tierra, batiendo constantemente a Latvala y en tiempos incluso de los dos de arriba con mucha regularidad.
La sorpresa del año ha sido sin duda el piloto de Citroën Junior Team, Sébastien Ogier. El joven galo comenzaba la temporada defraudando a muchos de los que le habían nombrado como el futuro sucesor de Loeb. Las continuas salidas de pista del principio han ido dejando paso a grandes resultados y sobre todo un trabajo muy constante recompensado entre otros por el segundo puesto conseguido en el durísimo Acrópolis.
Petter Solberg también tenia que estar en este articulo. Y es que el nórdico se ha repuesto de todos los contratiempos sufridos consiguiendo de nuevo estar entre los pilotos de arriba. No olvidemos que hace justo un año ni el mismo sabia su programa de 2009. finalmente y tras mucha paciencia con un vetusto Xsara WRC, llegaba la recompensa en forma de C4 y con él la posibilidad de correr el próximo año con ciertas garantías de lucha por el titulo.
En líneas generales también me gustaría comentar el buen trabajo de los cabezas pensantes de la marca gala. Tras numerosos errores, como el de Australia, y viendo que los dos campeonatos se les escapaban, dieron con la tecla adecuaba para contentar a ambos pilotos a pesar de deslucir un tanto la competición. Y es que no debió ser fácil convencer a Dani Sordo para que se dejara ganar en su tierra. Un buen contrato y la promesa de un futuro ligado al mejor equipo del momento fueron suficientes para ello.
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