Posiblemente iba a ser el evento de la próxima semana junto a los Grandes Premios de Fórmula 1 y Moto GP. La subida al Pikes Peak es una de esas competiciones que siempre deben estar señaladas en el calendario, en un principio este año estaba programado para el domingo 8 de julio, sin embargo el riesgo muy alto de que se produzcan incendios forestales ha hecho que los organizadores tomen la decisión de retrasar la prueba.
Al parecer el Servicio Forestal de Estados Unidos ha informado que las condiciones son tan extremas, que junto a la incapacidad de predecir el avance del fuego, hace imposible mantener el nivel de seguridad mínimo. Es por ello que el segundo evento del motor más antiguo de USA se retrasará hasta finales de este verano, esperando que esta nueva fecha garantice los requisitos de seguridad necesarios para público, competidores y habitantes de la zona.