El Gran Premio de Malasia se ha convertido en un auténtico desafío para equipos, pilotos y máquinas. Las altas temperaturas, por el orden de los 40 grados en el ambiente, la humedad reinante en la nación asiática y el extremo calor que generan los monoplazas durante el fin de semana, originan un escenario sofocante, un micro infierno en el planeta.
En medio del encendido panorama, los equipos de Fórmula 1 deben ingeniárselas para que sus coches no retengan en extremo las altas temperaturas porque tal eventualidad provocaría que se fundieran en alguna recta de Sepang. Por tal razón, algunas escuderías ya muestran propuestas aerodinámicas dispuestas a manera de sistemas refrigerantes.
Lotus agregó unas branquias en los laterales de la cabina, una opción muy popular ya que se distingue también en el Mercedes AMG F1W04 y en el Red Bull RB9. Por su parte, en Toro Rosso aplicaron una propuesta diferente, aunque también se ubica al lado del cockpit, en lugar de branquias lucen una rejilla, la cual se observa con claridad cuando el equipo retira un panel. Se cree que tal dispositivo proyecta el calor hacia los pontones laterales.
Por su parte, en Williams optan por abrir pequeños pontones laterales a lo largo de toda la parte trasera para así intentar despejar el aire caliente de la línea central del coche. En tanto, en Red Bull se puede advertir una apertura adicional en la parte de la horquilla frontal ubicada en la suspensión trasera, lo que indica que desean aliviar con rapidez el calor generado en la zona donde se ubica el motor.
Vía | f1technical
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