El regreso de Kimi Raikkonen a las pistas de la Fórmula 1 se produjo el pasado 23 de enero en el circuito Ricardo Tormo de Valencia. El finlandés rodó con el antiguo Renault R30 calzado con neumáticos Pirelli. El tiempo es oro y el nuevo piloto de Lotus F1 Team no quiere perder ni un segundo para volver a estar a punto.
Las primeras declaraciones de Kimi Raikkonen dejaron claro que espera luchar en la mitad de la parrilla, aunque, conociéndole, aprovechará la mínima oportunidad para asomar la cabeza en los puestos de honor. Manos tiene de sobra para ello el que fuera campeón del mundo en 2007. Han pasado unos cuantos años desde entonces, pero al finés aún le queda cuerda para rato.
Después de los días que tuvo de pruebas en Valencia, Kimi Raikkonen comentó:
Me esperaba sentir más velocidad. Sí, Valencia no es el circuito más rápido que existe, pero es bastante tradicional: me esperaba tener sensación de velocidad al pisar fuerte el acelerador, pero la tuve quizás sólo una vez.
El finlandés se muestra ilusionado de cara a la nueva temporada y confía en el buen trabajo de su escudería:
Por el trabajo que estamos haciendo, estoy convencido de que podremos alcanzar grandes metas. El equipo tiene todo lo necesario para crear un buen monoplaza, no nos estamos olvidando de nada. El personal del equipo está deseoso de firmar un buen año y la atmósfera es de optimismo, un poco más familiar en comparación a la de otras grandes escuderías. Es muy bonito trabajar con este grupo.
Vía | TheF1