Uno de los hombres de la carrera ha sido el francés Jean-Éric Vergne, que ha cruzado la línea de meta con una magnífica novena posición. El de Toro Rosso partía desde la vigésima posición después de haber montado su sexto motor térmico del año.
Al igual que le sucedió a su compañero Daniil Kvyat hace un par de carreras, Jean-Éric Vergne ha tenido que usar su sexto motor térmico este fin de semana en Suzuka. La undécima posición de ayer en clasificación se convertiría en la vigésima.
A pesar de salir tan atrás, Vergne ha conseguido cruzar la línea de meta en la novena posición, llevando una estrategia a dos paradas en las que colocó neumáticos intermedios y entró a boxes en el momento adecuado. El francés ha acabado la carrera por delante de su compañero de equipo y de Räikkönen. Aunque está contento con su actuación, Vergne no puede evitar pensar en el estado de Bianchi.
Estaba muy contento con mi carrera hasta que fue informado del accidente de Jules. Estar informado sobre su situación es todo lo que importa en este momento. Por mi parte, salir desde atrás de la parrilla y acabar en los puntos al final es muy bueno. Hoy, en estas condiciones, era muy difícil no cometer errores mientras intentaba pilotar lo más rápido posible, pero creo que el equipo y yo hemos hecho un gran trabajo
Esta es la segunda carrera en la que Vergne consigue acabar en los puntos con un buen resultado y dejando buenas sensaciones, tras el sexto puesto logrado en Singapur.
