A pesar del gran resultado conseguido en el pasado Rally de Catalunya, la temporada de Jari-Matti Latvala no se puede considerar que haya sido buena. Además del accidente de esquí que le dejaba fuera del Rally de Argentina, el finlandés que partía este año como el principal rival (al menos teórico) de Sébastien Loeb ha tenido numerosos errores que ya a mitad de temporada le situaban muy lejos del alsaciano.
Afortunadamente para él, el campeonato ha finalizado con una tercera posición en la general, pero Latvala no ha querido ocultar su frustración al saber que contaba con uno de los mejores coches y que posiblemente haya desperdiciado la última ocasión de poder batir a Sébastien Loeb.
En cierto modo me ha decepcionado que en estos años que no haya podido conseguir el campeonato de constructores, ni el de pilotos. Si pierdo el tiempo, entonces empujo duro y tratar de recuperar de nuevo el tiempo y luego me voy fuera de la carretera, en lugar de admitir y aceptar la situación. Personalmente tenía ganas de vencer a Loeb, pero no funcionó.
Ahora le llega otra mala noticia. Tanto Volkswagen como Jari-Matti Latvala esperaban que esta misma semana, M-Sport y Ford le dieran el visto bueno para que el finés pudiera montarse ya sobre el Polo R WRC. Sin embargo, los días pasan y en Alemania todavía no han obtenido ninguna respuesta. El tiempo corre en contra de él.
Vía | Autosport.com