Con su mono ignífugo varias tallas mayor y su habitual diseño de casco se presentaba ayer Jacques Villeneuve como piloto del equipo Albatec Racing para el Campeonato del Mundo de RallyCross. El canadiense tendrá un duro reto la próxima temporada en una categoría que no permite ni un solo minuto de respiro y en la que el contacto en pista es algo más que habitual. Nadie regala un metro y aquí la experiencia es algo más que un grado.
El campeonato comenzará el próximo mes de mayo con la prueba portuguesa de Montalegre y durante las 12 pruebas que conforman el calendario se competirá en circuitos completamente distintos en cuanto a diseño y características. Afortunadamente para Villeneuve, el menor tamaño de los mismos hace que no sea difícil aprendérselos, pero sí el hecho de conocer todos sus secretos, algo en lo que tienen una mayor ventaja pilotos que han disputado el campeonato durante las últimas temporadas.
Aun así, 2014 será un año de cambios, con la creación del Campeonato del Mundo y la inclusión de varios circuitos completamente nuevos y por tanto, todos los participantes saldrán en igualdad de condiciones. Junto a su compañero y jefe de equipo, Andy Scott, Jacques tratará de domar su nuevo Peugeot 208 de más de 600 CV y tracción total con el que ya se le ha visto bastante desenvuelto en los primeros test celebrados en Francia. Veremos si en pista, con todos esos pilotos hambrientos es capaz de dejar las mismas sensaciones o volvemos a ver actuaciones como en la NASCAR.