Mientras de fondo continúa un nuevo día de test que se está caracterizando por la poca participación de los equipos grandes (al menos por el momento), en Renault empieza a haber razones para un gabinete de crisis. El motorista galo sigue sin terminar de convencer, a pesar de que el de ayer fue un día en el que el RB10 pudo estar bastante cerca de los tiempos más rápidos, quedándose Daniel Ricciardo a poco más de una décima del crono marcado por Fernando Alonso con el F14 T.
A pesar de mostrar parte de su rapidez, el monoplaza de Red Bull rodó un día más, "bastantes menos" kilómetros de los que hicieron sus rivales. Como contraste del positivismo mostrado por el piloto australiano, sustituto de Mark Webber en los 'toros rojos', hay otros miembros del equipo mucho menos optimistas. Entre ellos Helmut Marko, que ayer aseguraba que el propulsor de Renault tiene 165 CV de potencia menos que el de Mercedes, una cifra incluso mayor de lo que se dijo hace unos meses.
Sin duda bastante alarmante, sin embargo, el único dato objetivo del que nos podemos fiar actualmente es que el Red Bull es 30 km/h más lento en recta que los motores Mercedes, aunque es de presuponer que el motor de Renault sigue sin ser exprimido al máximo. Según declaró Marko a Sport Bild, los problemas siguen encontrándose en el software e incluso el equipo Red Bull ha enviado un grupo de trabajo a Francia para tratar de ayudar a la firma del rombo a solucionar sus problemas. A pesar del esfuerzo, el asesor del equipo ya defiende la idea de ir a Melbourne dentro de dos semanas con la mentalidad de “nadar y guardar la ropa”.
Vía | Autosport.pt