Cuatro grandes premios, con sus sesiones de entrenamientos libres, de calificación y sus carreras ha necesitado Michael Schumacher para superar a Nico Rosberg. Al comienzo de la temporada y tras confirmarse el regreso de Michael Schumacher, el joven piloto alemán recibía el peor compañero de baile posible.
Todos sabemos que Nico Rosberg es un gran piloto, como lo demostró en Williams, pero llegar a Mercedes GP y tener que batirse con Michael Schumacher (el nuevo niño mimado de Ross Brawn) iba a ser una prueba muy dura. Pero desde el primer gran premio del año en Bahréin, Rosberg comenzó a demostrar que el hueso duro de roer iba a ser el.
Y lo dicho, cuatro grandes premios después, con dos podios y muchos puntos más a favor de Nico Rosberg, Michael Schumacher por fin ha encontrado la fórmula. Los cambios en el Mercedes GP W01 han dado sus frutos. El nuevo paquete y el nuevo monoplaza adaptado a su estilo de conducción le han permitido colarse entre los mejores.
El monoplaza de Michael Schumacher es un poco más largo, que ya es mucho decir teniendo en cuenta que los monoplazas de 2010 son unos 15 centimétros más largos que los del pasado año. Más longitud equivale a un mejor reparto de pesos que parece ser que es lo que necesitaba el alemán.
Pero más allá de las novedades técnicas, lo que estamos viendo, es que Schumacher ya se cuela entre los mejores. El alemán ha reconocido que el coche aún no está en las condiciones que el desearía pero que están dando un paso adelante. Mañana en carrera, veremos si las mejores también tienen su repercusión en los deseados puntos y podios que Michael necesita para recuperar la confianza perdida.
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