Esta mítica subida de montaña tiene este año un nombre propio destacado, Marcus Grönholm. El finlandés aceptó la proposición de Ford Europa para participar en este nuevo reto junto a Andreas Eriksson y con un Ford Fiesta de 800 CV como montura. Nada más llegar a Norteamérica los dos pilotos y sus dos ST T16 4x4 se fueron delante de uno de los muchos concesionarios de Ford para hacer una curiosa presentación.
Vaya sosera que es Andreas Eriksson tras ver sobre todo la exhibición de control de su compañero que se deja sus cuatro neumáticos en el asfalto del aparcamiento. Después tocaba probar por primera vez el coche en pista y eso ya era otro cantar. Grönholm se ha quejado de que al coche le faltaba algo de potencia en bajos, pero que cuando llegaba era impresionante y el coche se comportaba muy bien, ¡Normal con 800 CV! El segundo día todo mejoraba y los dos Fiesta se mostraban mucho más competitivos que en la jornada del miércoles. Eriksson por su parte se llevaba un susto y volcaba después de tener una pequeña salida de pista. Aun así los dos pilotos han destacado que deben buscar una solución para acortar un poco las dos primeras marchas ya que el coche se queda demasiado “muerto” a la salida de las curvas lentas.
Presentación del equipo:
Primer día de pruebas:
Segundo: