El Charlotte Motor Speedway en Carolina del Sur, centro neurálgico de la NASCAR, ha sido el escenario para que Ford presente el nuevo Ford Fusion con el que disputarán las NASCAR Sprint Cup Series a partir de 2013. Un modelo que a primera vista es atractivo, y que rompe completamente con la estética que la NASCAR ha tenido durante los últimos años, cortesía del Car of Tomorrow (CoT).
Parece ser que a alguien se le ha encendido la bombilla y ha pensado que si la NASCAR es una competición basada en vehículos de serie (al menos en su forma exterior) lo mínimo es que realmente se parezcan a ellos. El primer paso se dio en 2010 en las Nationwide Series. Ford y Dodge fueron las marcas que modificaron el morro del vehículo y lo hicieron similar a la de sus muscle-car, el Mustang y el Charger.
La Daytona 500 de 2013 servirá como puesta de largo del nuevo Ford Fusion (Mondeo en el mercado Europeo). Más allá de unas simples pegatinas, las formas y proporciones del Fusion tienen su reflejo en la versión de competición. Al igual que ocurre con el morro y la parrilla. Será la tercera ocasión en la historia que Ford presentará simultáneamente un modelo en versión real y su versión NASCAR. Algo que ya ocurrió en 1968 con el Ford Torino y en 2006 con el anterior Fusion.