Conviene recordarlo y a mi me gusta hacerlo de vez en cuando. Aunque el título de pilotos equivale a la gloria en la Fórmula 1, el título que otorga mayor cantidad de dinero, y el que agradecen las escuderías, es el mundial de constructores. Quizás entre las escuderías más grandes, con sus enormes presupuestos, importe menos quedar tercera o cuarta pero según bajamos en la clasificación, la lucha se convierte en feroz ya que una posición u otra equivale a salvar el presupuesto para la siguiente campaña. Pero hoy no es el turmo de la brillante clase media.
Hoy nos vamos a centrar en la encarnizada lucha que estamos viviendo entre Ferrari, Lotus y McLaren. Cuarta en la clasificación hasta ayer, Ferrari ha visto como la gran actuación de Fernando Alonso sumada a la cuarta plaza de Felipe Massa les han hecho escalar hasta la segunda plaza. El hecho de que Felipe Massa haya logrado su mejor resultado de la temporada se traduce en unos puntos muy valiosos para Ferrari. El brasileño se está jugando su futuro en la escudería, y quizás en la Fórmula 1, y permitir que Ferrari lucho por lo millones del título de constructores es lo mínimo que se le puede pedir. Lo máximo es que estuviera luchando por la general de pilotos, pero eso es algo utópico a estas alturas.
En este punto es en donde Lotus está mostrando que la regularidad puede tener su resultado a final de temporada. Casi sin hacer ruido, Kimi Raikkonen se ha colocado quinto en la general de pilotos. Quizás un poco lejos de la lucha por el título pero, ¿alguien esperaba ver a Raikkonen tan arriba tan pronto?. El talento del finés unido a los grandes resultados de su compañero (Romain Grosjean ha puntuado en cinco de las nueve ocasiones posibles y siempre ocho puntos o más) hacen que a estas alturas, Lotus esté tercera en la general por delante de McLaren.
Es la escudería británica la que está dando la de cal. Las dos últimas carreras de McLaren han sido dos fracasos estrepitosos. Lewis Hamilton se está deshinflando de una manera que pocos podíamos adivinar aunque lo más preocupante es el estado de forma de Jenson Button. El británico terminó la temporada pasada a un gran nivel que parecía que tenía continuidad esta temporada cuando ganaba el primer gran premio del año. Non plus ultra (No más allá). Desde entonces una segunda posición y un trío de décima, novena y octava plazas asoman como mejores resultados. A estas alturas acumula el doble de ceros (4) que los conseguidos el año pasado (2).
Por último, no conviene olvidar que la clasificación en el mundial de constructores decide también la ubicación del box para la siguiente temporada. Algo que, según a quien preguntes, puede tener un elevado valor de cara a ganar algo de tiempo en boxes.