El pasado año, Peugeot infringió a Audi su peor derrota de la última década (se podría decir que su única derrota). El doblete de Peugeot fue incontestable, pero lo peor para los de Ingolstadt fue que en ningún momento el nuevo Audi R15 pudo estar a la altura de su rival galo. El ritmo de carrera del 908 fue muy superior que impidió que el R15 sacara ventaja de su menor número de entradas en boxes. Además, la lluvia que en 2008 les ayudó a conseguir la victoria, no hizo acto de presencia.
En 2010, Wolfgang Ullrich y los suyos se pusieron manos a la obra y realizaron una revisión exhaustiva del Audi R15, hasta convertirlo en el R15+. Un coche casi totalmente nuevo que debería colocarlos de nuevo en la pomada. Victoria en su debut en los 1000 kilómetros de Le Castellet sin más rivales que los Aston Martin. Las cosas cambiaron en Spa-Francorchamps. Esta vez con lluvia, doblete de Peugeot. Las cosas no cambiaban.
Audi se mostraba tranquila. Spa era una prueba y la hora de la verdad llegaba en las 24 horas de Le Mans. Tras finalizar los entrenamientos, la situación era clara. Dominio de Peugeot. Las cuatro primeras posiciones y con los Audi demasiado lejos. El rayo de luz y esperanza lo daba el Audi R15+ con el número 9. Rockenfeller-Bernhard-Dumas lograban bajar del 3:22 hasta colocarse a menos de dos segundos del tiempo de la pole. Hoy comienzan las 24 horas más largas del año. Una nueva lucha entre Audi y Peugeot.
En Racingpasión | 24 horas de Le Mans 2010