Malas y buenas noticias para los seguidores del equipo Chip Ganassi. A pesar de perder el coche numero dos, pilotado por Dixon, Montoya, Franchitty y McMurray, ha conseguido ponerse de nuevo líder con la primera unidad de la formación. La verdad es que el #02 ya había perdido el liderato antes de tener que retirarse por un problema en el motor BMW.
Jarnie McMurray no podía aguantar el ritmo del Ford de Almendiger, ni el del Porsche del portugués Barbosa. Por ello el equipo se la jugó y decidió sacar de nuevo a la pista al explosivo Montoya para intentar volver de nuevo a la cabeza. Sin embargo y como ya hemos comentado el propulsor no dio más de si teniendo que abandonar poco después de pasar la medianoche en Florida. A partir de ese momento el Porsche del equipo Riley se situaba líder. Pero por poco tiempo ya que el #01 de Ganassi comenzaba a bajar los tiempos y durante las primeras horas del domingo, en Estados Unidos, conseguía superar a sus rivales, manteniendo la ventaja hasta llegar al ecuador de la carrera.
Juan Pablo Montoya demostraba su tristeza tras el abandono:
Fue muy triste tener que retirarse, porque teníamos un coche realmente bueno. Todos los pilotos del equipo fueron capaces de liderar la carrera y teníamos un coche para ganar. Pero así son las carreras.
El viernes hemos cambiado el motor por uno nuevo, pero había un problema con él y tuvimos que volver a la prueba. Estábamos un poco preocupados desde entonces, pero estas cosas pasan.
En la clase GT hay gran lucha entre el TRG Porsche Flying Lizard numero 67 y el Camaro numero 57. El resto de los pilotos han perdido dos o más vueltas respecto a los dos primeros clasificados.