Si hay una curva universalmente conocida como la mejor curva de todo el calendario de la Fórmula 1, esa es sin duda la curva de Eau Rouge, en el circuito belga de Spa-Francorchamps. Hay muchas otras curvas míticas que intentan arrebatarle ese honor (130R, Beckets...), pero ninguna es tan compleja como Eau Rouge.
Eau Rouge es una curva de alta velocidad a la que se llega tras una larguísima recta en bajada. La entrada de la curva coincide con el punto donde la pista empieza a subir, y la sensación que tienen los pilotos en ese cambio de dirección unido al cambio de altura es indescriptible. Para ser justos, lo que hace más mágica, si cabe, a Eau Rouge es su “matrimonio” con la curva ciega a derechas y en subida (10% de pendiente) que le sigue, conocida como Raidillon. Las velocidades que se alcanzan en Eau Rouge rozan los 300 km/h, y si bien ahora con los V8 con control de tracción el reto ya no es el mismo, con los antiguos V10 eran pocos los valientes que se atrevían a entrar en Eau Rouge sin levantar el pie del pedal del acelerador. En Eau Rouge destacan los pilotos con buenas manos, ya que negociar bien esta mítica curva te lleva a estar en disposición de atrapar a tus rivales en la larga recta que sigue a continuación, y que acaba en la frenada de Les Combes. Pero claro, una curva de estas características siempre tiene también su lado negro: los accidentes. No son pocos los que han probado las escapatorias de Eau Rouge, e incluso Jacques Villeneuve, uno de los que siempre fardó de pasar por Eau Rouge a fondo, tuvo un impresionante accidente en la sesión clasificatoria de 1999, al que no dudó en calificar como “el mejor accidente de mi vida”.
Fernando Alonso habla sobre Eau Rouge: "Entras en la bajada de la curva, tienes un repentino cambio de dirección en la parte más baja y entonces hay una abrupta subida. Desde el cockpit no se puede ver la salida, y conforme vas subiendo no sabes dónde vas a aterrizar. Es una curva crucial para el tiempo de la vuelta, y también en la carrera, porque hay una larga subida que la sigue donde se puede perder mucho tiempo si cometes un error. Pero también es una curva importante para las sensaciones del piloto. Genera sensaciones especiales en cada vuelta, porque también se comprime todo el cuerpo cuando pasas por el punto más bajo de la curva. Es muy extraño, pero también muy divertido".