En 2010, con la llegada de la nueva reglamentación con grandes depósitos, ausencia de KERS y otros cambios, pensábamos que Adrian Newey agitaría la varita mágica que tiene por lápiz y nos sorprendería a todos con el diseño del Red Bull RB6. Error, el Red Bull RB5 era un gran diseño que sólo se veía lastrado por su fragilidad. Corregidos los defectos, el RB6 fue una evolución del concepto de 2009 que ha permitido a Red Bull conseguir ambos títulos.
Para 2011, tendremos más de los mismo. Adrian Newey ha afirmado que el Red Bull RB7 será una evolución del monoplaza de esta temporada. Si la fórmula es ganadora, no es necesario cambiarla por completa y arriesgar con un diseño completamente nuevo.
Sin doble difusor que pegue a los monoplazas contra el suelo y sin F-Duct que mejore su velocidad, la importancia de un buen diseño, más allá del alerón regulable, volverá a ser fundamental. Newey espera que, al igual que en las dos últimas temporadas, sus rivales se pasen buena parte de la temporada preguntándose sobre la legalidad de sus coches y copiandolos. Eso será síntoma de que han hecho un buen trabajo en el diseño del monoplaza.
Vía | ESPN F1
