A pesar de la prohibición del cambio de mapa motor entre clasificación y carrera, no hubo los esperados cambios. Teóricamente los que deberían salir perjudicados con la medida, los Red Bull, volvieron a conseguir un doblete. Charlie Whiting hablaba de medio segundo de diferencia, pero todo parece indicar que más allá de una diferencia contable, el secreto de Red Bull está más allá del mapa motor y rivales y FIA siguen sin tener ni idea de qué es.
Para el Gran Premio de Gran Bretaña, la FIA prohibió los difusores soplados (expulsión de más de un 10% de gases en frenada) medida que debería tener un efecto más negativo en los monoplazas de Milton Keynes pero que tendrá efectos negativos en todas las escuderías. Por ello, Stefano Domenicali ha afirmado que, en Silverstone se podrá ver quién es el principal perjudicado tras la decisión de la FIA. Parece que algún jefe de equipo no tiene tan claro que la prohibición de la FIA consiga reducir las prestaciones de Red Bull. Quizás en ese momento descubramos alguna sorpresa no tan esperada.
Vía | MARCA
