Desde que se anunció que Estados Unidos, y más concretamente Austin, iba a celebrar un gran premio de Fórmula 1 en el nuevo Circuito de las Américas, todas las noticias que han llegado alrededor de el han sido de dudas y problemas. Esta semana, por problemas entre los organizadores del futuro gran premio y los promotores del circuito, se han parado las obras. Algo que no ha gustado demasiado a Bernie Ecclestone que cansado de tantas dudas, les ha dado un plazo de tres semanas para arreglar “sus” asuntos y continuar adelante con los preparativos.
Pero más allá de problemas internos, todo parece indicar que Bernie Ecclestone está poniendo alguna que otra piedra en el camino del que pasaba por ser el regreso de la Fórmula 1 a los Estados Unidos. El contrato entre la FOCA y los organizadores, que tenía una duración de 10 años, ha sido cancelado debido a que aún no se han recibido las garantías de pago solicitadas por Ecclestone. Eso ha provocado que desde los promotores del circuito, los que ponen los 300 millones de dólares para su construcción, tengan aún más dudas. La pescadilla que se muerde la cola. Sin carreras no hay circuito y, evidentemente, sin circuito no habrá carreras.
Y todo ello sin contar que la llegada del Gran Premio de América en el circuito urbano de Nueva Jersey podría reducir el interés de los aficionados por la carrera y el impacto económico. Algo que no ha gustado demasiado a los organizadores y que califican directamente como problema. El día 7 de diciembre la Consejo Mundial se reunirá en Nueva Delhi. Esa esa la fecha tope ya que allí se conocerá el calendario definitivo par la próxima temporada. Mucho me temo que Texas no estará en el.