En la Fórmula 1, los recursos se optimizan para conseguir un sólo resultado, estar en lo más alto. Por ello no resulta nada rara la noticia conocida hoy. En el Gran Premio de Japón, Red Bull ha estrenado un nuevo alerón delantero, uno para cada piloto. El problema llegó durante los entrenamientos libres de ayer en los que Sebastian Vettel dañó el suyo.
A partir de ese momento, en Red Bull no perdieron ni un segundo. Embarcaron las piezas necesarias en un vuelo comercial entre Londres y Nagoya para posteriormente trasladarlas hasta el circuito en helicóptero. El nuevo alerón llegó tan sólo media hora antes de que comenzara la clasificación. A tenor de los resultados, la inversión está más que justificada. El nuevo alerón, que daba algunas centésimas de mejora, ha podido entregar la duodécima pole del año a Sebastian Vettel.
Contrariamente a lo que ocurriera en el Gran Premio de Gran Bretaña del pasado año, y a pesar de que Sebastian Vettel aún no ha certificado el título, en Red Bull no pensaron en coger la unidad de Mark Webber para dársela a su compañero. Christian Horner ha justificado la acción afirmando que no se trata del mismo caso. En Silverstone el problema se produjo por un fallo en la pieza mientras que esta vez, ha sido por error de un piloto.
En Motorpasión F1 | Gran Premio Japón Fórmula 1 Vía | Autosport
