Aunque lo dudo mucho, Citroën se acaba de liar la manta y ha asegurado que durante esta temporada no obligará a ninguno de sus dos pilotos a aceptar el rol de segundo piloto. Esto quiere decir que Sébastien Loeb y Ogier lucharán cada rally por ganarse el uno al otro, sobre todo después de que la nueva estrella francesa se ha negado completamente a ser el numero dos del heptacampeón.
El propio Olivier Quesnel ha reconocido que este hecho puede provocar algunos roces entre los dos pilotos de la marca gala. Sobre todo tras conocer por algunos medios que la relación entre Loeb y Ogier no era demasiado buena tras la victoria del segundo en el Rally de Portugal desoyendo todo tipo de órdenes desde la dirección del equipo.
Ogier planea de nuevo ser un quebradero de cabeza para su jefe de filas, a falta de saber como se adapta cada uno al nuevo coche y de la situación del Citroën DS3 WRC con respecto al Ford Fiesta. De momento el ganador del Mundial Junior en 2008 ya ha dejado muy claras sus intenciones en una sola frase.
De ninguna manera bajaré al rol de número dos.
Desde luego, todo esto tiene pinta ya antes de comenzar que en Citroën a final de temporada puede haber toda una verdadera guerra Civil en el seno del equipo. Aunque desde fuera posiblemente se convierta en un hecho realmente divertido para los aficionados, ver pelear a estos dos pilotazos hasta el final.
Vía | WRC.com