Hace unas semanas ya os hablamos de la extraña decisión por parte de la FIA y de Jarmo Mahonen de no permitir invertir la clasificación del sábado de cara a la etapa sobre mixta (tierra con pequeñas secciones de asfalto en el tramo de Terra Alta) ha hecho que los equipos ya comiencen a pensar en las estrategias. Uno de ellos es Citroën, que ya prácticamente tiene imposible el título de constructores debido a que Volkswagen tan sólo necesita una séptima posición para cantar el alirón.
En el equipo galo, ya sin Sébastien Loeb entre sus filas, se encuentran planeando dos estrategias completamente distintas. Mientras que Dani Sordo saldrá al ataque desde el primer tramo, aprovechándose de que las dos primeras etapas se realizarán sobre asfalto, Mikko Hirvonen elegirá una estrategia mucho más conservadora, (conocedor de que su nivel sobre esta superficie no es lo suficientemente destacado) esperando que una posición de salida más retrasada durante el domingo le dé una posición más ventajosa.
Sin duda, no es la mejor noticia para los intereses de los pilotos especialistas en asfalto, que pueden ver como toda la ventaja obtenida durante los dos primeros días (habitualmente las diferencias a la décima que se marcan sobre el alquitrán no son tan abultadas como en la tierra, dónde se contabilizan en segundos) puede irse al traste. Cada vez quedan menos pruebas de asfalto puro en un calendario que hace años se despidió de pruebas como San Remo o Córcega.
Un pensamiento que he tenido durante los últimos tiempos es la mala suerte que ha tenido Dani Sordo con el rally de casa los últimos años. El cántabro ya conocía todos sus secretos en 2009, año en el que tuvo que aceptar las órdenes de equipo para ayudar a conseguir el título de pilotos de Sébastien Loeb, pero después cuando parecía que iba a poder pelear en 2010 cara a cara con el galo, los problemas mecánicos y a partir de 2011 el cambio de formato de la prueba a un rally mixto le restó las posibilidades de ser profeta en su tierra. Esperemos que este año sea diferente. Al menos Sordo saldrá con la tranquilidad de tener asegurada su participación en el próximo Rally de Gales.
