En una atípica jornada de WTCC, Chevrolet ha conseguido sumar dos importantes victorias de cara al campeonato con una espectacular primera carrera,y un triplete en la segunda que ha servido para recortar puntos con SEAT, la segunda clasificada (y con BMW, claro, pero están más lejos).
Con Tiago Monteiro en la pole position, y con la novedad de los nuevos motores TDI de SEAT, con mayor potencia, y mayor peso, pero unas prestaciones finales realmente prometedoras. Monteiro no llevaba ese nuevo motor, pero si Gené, que tuvo un inicio espectacular,llegando hasta la segunda posición, lo que sería un éxito tremendo para SEAT. La lluvia intermitente vino a desbaratar los planes de muchos, y Gené experimentó problemas de neumáticos que acabaron relegándolo a la 18ª posición, y la verdad es que fue una pena. Había salido muy bien y fue remontando hasta adelantar, incluso, a Monteiro y colocarse segundo. El rendimiento del motor, con lo diferente que es en cuanto a regímenes de giro, peso, potencia... me pareció espectacular.
Así las cosas, Robert Huff consiguió la primera victoria del día para la marca bajo condiciones cambiantes de tiempo, aprovechando la ventaja inicial de haber montado gomas de seco, y después de secarse la pista, cuando empezó a perder mucho tiempo, le vino fenomenal que cayesen unas gotas para refrescar sus neumáticos.
La segunda carrera fue enteramente dominada por los Chevrolet, aunque el vencedor fue el menos esperado, pues Rickard Rydell, saliendo de la novena posición, se aupó al primer puesto gracias a su apuesta por los neumáticos de seco, cosa que aprovechó para pasar a sus compañeros de marca, Alain Menu y Nicola Larini. Un nuevo 1-2-3 para Chevrolet, el segundo de la temporada después de Porto.
Ahora, a esperar casi un mes para la siguiente prueba, en Oschersleben.
Vía | FIA WTCC
