Nürburgring está pasando por su peor momento de la historia. La economía del mítico complejo (además del trazado de gran premio no podemos olvidarnos del anillo norte, Nordschleife) está en coma y tan sólo un milagro podría salvar su presencia en el calendario de la Fórmula 1 en 2013. Pero eso podría cambiar ya que Bernie Ecclestone va a hacer todo lo comercialmente factible para salvar el Gran Premio de Alemania en Nürburgring.
Para ello, el "dueño" de la Fórmula 1 está dispuesto a perdonar el canon de 2013 y cubrir los gastos de celebración a cambio obtener todos los ingresos. Una propuesta a todas luces deficitaria para el "bueno" de y que sería la mejor tabla de salvación para el trazado alemán. De no llegar a buen puerto, el británico ya ha adelantado que hablarán con Hockenheim para que albergue la carrera del próximo año.