Desde el GP de Hungría 2005, cuando salió en sexta posición y acabó 11º, Fernando Alonso no se quedaba fuera de los puntos en una carrera en la que no hubiera tenido que abandonar.
Esa es la cruda realidad actual para el piloto asturiano y, sobretodo, para un alarmantemente poco competitivo Renault R28. El dos veces Campeón del Mundo ha finalizado hoy el GP de Bahrein en la misma posición en la que ha salido, la décima.
Aunque muchos se aferran a las mejoras que se esperan para Barcelona y aunque también es cierto que el alerón trasero del R28 de Alonso ha quedado tocado desde la primera vuelta por la embestida de Hamilton, eso no puede tapar lo que hemos visto durante todo el fin semana, que hasta cinco equipos o incluso seis son superiores en este momento a Renault. "Hay tres equipos en otro nivel, Ferrari, McLaren y BMW, y lo bueno sería intentar meternos por detrás de ellos, pero para eso tendremos que adelantar a Toyota, Williams y Red Bull, que ahora mismo están por delante", así de claro lo tiene Alonso, que confía al igual que todo su equipo en las mejoras que el coche debe presentar en Barcelona.
"Son nuestra gran esperanza", ha reconocido Alonso tras una carrera, la de hoy, en la que no le ha sorprendido quedarse fuera de los puntos. "Salimos 10º y acabamos 10º, nada que no esperáramos".
El dos veces Campeón del Mundo no ha querido buscar excusas con el incidente con Hamilton. "Tengo el alerón roto, pero el coche no se comportaba demasiado mal en comparación con los entrenamientos o la calificación. Con el alerón normal no creo que hubiésemos hecho mucho más", admitía el asturiano, que se tomaba con humor la acción de Hamilton: "El McLaren corría demasiado, mucho más que mi coche, y me llevó por delante".
Eso sí, Alonso ha enviado un mensaje a navegantes muy claro: Todo el equipo sabemos que tenemos que mejorar lo antes posible porque a nadie le gusta hacer 57 vueltas rodando en 10ª o 11ª posición. Si en Barcelona fuera mal, entonces sí que habría que comenzar a preocuparse de cara al resto de la temporada".
Pues no es por ser pájaro de mal agüero, pero me huele a que esas prometidas mejoras no van a obrar ningún milagro y que tendremos que acostumbrarnos a ver este año a Alonso entre el 6º y el 10º puesto. No hay más. Un año de penitencia para los 'alonsistas'.
