Tal cual lo ha dicho la Federación Internacional del Automovilismo en un comunicado. La inesperada marcha de BMW de la Fórmula 1 al concluir esta temporada ha pillado a muchos por sorpresa menos a la FIA. Pero la FIA se muestra fría, tajante e impasible y aprovecha la oportunidad para defender las propuestas de recortes de costes brutales propuestos anteriormente.
La FIA lamenta el anuncio de BMW de retirarse de la Fórmula 1 pero no está sorprendida. No se puede esperar que los fabricantes de coches sigan inyectando grandes sumas de dinero a la Fórmula 1 cuando su supervivencia depende de despidos, cierres de plantas y apoyo de los contribuyentes. Esta es la razón por la que la FIA preparó las normativas para reducir costes drásticamente. Esas medidas eran necesarias para aliviar la presión de los constructores tras la salida de Honda, pero también para hacer posible que nuevos equipos entren.
El mayor problema para la FIA no es tanto que BMW abandone como equipo la Fórmula 1. Francamente, con la temporada que lleva el equipo germano-suizo, a la FIA le daría igual que fuera BMW que cualquier otro equipo pequeño con escasos o nulos resultados. Lo que a mí me preocuparía de ser la FIA es que la marcha de otro gran constructor pueda ser otro detonante para que otros le sigan.
De momento todos los que están dicen que seguirán el año que viene, pero todavía se pueden echar atrás. Tampoco puede intentar la FIA ver la marcha de BMW como el comienzo de su victoria, pues tampoco tiene la Fórmula 1 hoy en día lo que se dice su mejor imagen. Esa por la que muchos han visto bien tragar por algunas tonterías en relación a lo que se percibía. Pero eso ha cambiado. Así que yo que la FIA no lanzaría todavía tan gratuitamente al aire la táctica del erre que erre que ha llevado a Max Mosley a la picota, cosa que muchos todavía están digeriendo.
Vía | GPUpdate