En su primera generación, una de las tantas características diferenciadoras del Ford Mustang era su amplia gama de colores, entre las que se encontraba el color de la Barbie el Playboy Pink.
Este color tan particular empezó a ofrecerse en 1967 y 40 años después, parece que Ford pretende desempolvar todos esos botes de pintura que tienen guardados y volver a ponerlo entre las opciones del Mustang 2008. El motivo es bien simple, el Mustang es un éxito de ventas en los USA y aparte de todos los nuevos modelos que se han resucitado (que también tendrán su pedazo de mercado), habrá compradores que se conformen con algo novedoso y distinto, sin importar la potencia o prestaciones. Y el Playboy Pink será novedoso, sin duda.
Ahora que le quede bien o mal, eso ya os lo dejo a vuestra elección. Particularmente, no me compraría un Mustang rosa ni loco, pero si tuviese que elegirlo mi novia, creo que tendríamos unas cuentas discusiones con ese tema…
Vía | Autoblog
Más información | StangsUnleashed
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