Sólo puede pasar en Estados Unidos que una descomunal pick-up se subaste hasta alcanzar cifras totalmente desorbitadas. Hace unas semanas te hablábamos sobre la Ford F-22 Raptor, una camioneta muy especial, un one-off con reminiscencias de la aviación militar que ha sido capaz de alcanzar un precio final de 300.000 dólares.
El afortunado (y adinerado) propietario es, a su vez, único. Se trata de Gary Ackerman, propietario de Gaudin Ford en Las Vegas, quien es al mismo tiempo Comandante Honorario y Embajador del Escuadrón F-22 de las Fuerzas Aéreas estadounidenses en la base de Nellis (Nevada).
Más potencia y muchos accesorios con olor a barbacoa
Subastada en la AirVenture Oshkosh, esta F-150 Raptor desarrollada específicamente por Ford por una buena causa cuenta con una decoración muy especial, fibra de carbono en el capó y los pasos de rueda, estribos retráctiles, luces LED KC Hilites, línea de escape Borla en acero con colas de fibra de carbono y cambios estéticos como la parrilla con un F-22 o una pintura especial al estilo caza-bombardero.
Pero las mejoras no se quedan ahí ya que pese a su exclusividad seguirá siendo una pick-up práctica con un suelo en la zona de carga firmado por LineX, caja de herramientas, ruedas de repuesto con soportes en la caja, neumáticos Falcon Wildpeak y pinzas de freno de seis pistones Alcon pintadas en rojo. El interior se ha retocado también con una nueva tapicería de cuero en dos tonos con detalles F-22 y un equipo de sonido Kicker de 1.500 Watios.
Bajo la carrocería, las suspensiones se han modificado con material Deaver y Fox, y para rematar Ford ha confirmado que el motor EcoBoost V6 de 3.5 litros y doble turbo se ha apretado un poco hasta conseguir una potencia de 552 CV y 893 Nm, unos 100 CV más y 203 Nm extra con respecto al original. ¿No está nada mal, verdad?