Basta con ver la primera foto y alguno de los vídeos que encontraréis unas líneas más abajo para percatarnos de que no estamos ante una réplica en toda regla, pero el EVGT-40 de Andrew McClary es lo más parecido que vamos a encontrar a un Ford GT-40 eléctrico. ¿Qué suponen los cambios para los puristas? Cada uno dirá la suya, yo prefiero limitarme a decir que cuando uno se monta un coche lo hace como quiere.
La creación de este diseñador y programador parte de una estructura de fibra de vidrio de un Fiberfab Valkyrie de 1968 y un chasis oxidado. Dos años después, unas cuantas piezas más y alrededor de 30.000 euros en gastos, McClary ya cuenta con su propia recreación eléctrica del mítico Ford GT-40.
200 km/h de velocidad máxima y 200 kilómetros de autonomía son los datos que más destacan, pero entre sus particularidades también cuenta con paneles solares o incluso un sistema de control táctil mediante el que controlar las opciones básicas y conocer el estado de las baterías. Un compendio que sumado al buen hacer de Andrew como diseñador, ha derivado en una de las creaciones eléctricas amateur que más revuelo ha causado en los últimos meses.
A continuación tenéis otro vídeo en el que se muestran algunas imágenes del proceso de construcción del coche. La verdad es que hay que tener paciencia y ganas para meterte en un proyecto así. Eso por no hablar del dinero.
Vídeo | YouTube, YouTube
Vía | TechnologicVehicles
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