El Twike es un curioso vehículo híbrido. Normalmente los híbridos son la combinación de un motor eléctrico y uno de gasolina o rara vez el diésel. Lo curioso de este coche es que es una combinación entre un eléctrico y la tracción animal.
Y no, no es como el troncomóvil de los Picapiedra, es algo un poco más sofisticado. Este coche puede moverse exclusivamente en eléctrico pero si queremos aumentar la autonomía tiene la opción de usar las piernas para dar pedales.
Esta fabricado con aluminio y plástico en su mayoría con lo cual solo pesa 246 kg (sin ocupantes). En su versión con baterías de litio, el Twike puede superar los 200 Km de autonomía eléctrica, dependiendo claro de la velocidad, orografía y como no, de lo que pedalees.
Este vehículo puede alcanzar los 85 km/h con su motor de 5 kW (7 caballos) y se maneja con una especie de joystick, como un helicóptero. Se puede cargar completamente en unas tres horas en un enchufe doméstico.
Este triciclo ligero (podríamos llamarlo) lo bueno que tiene es que es tremendamente eficiente. Mucho más que un coche eléctrico convencional. Con el precio actual de la electricidad, andar 500 kilómetros con este “coche” te puede valer 2,5 euros.
Ya se han vendido 850 de estos vehículos desde que empezo a comercialiarse en 2004. Lo fabrican en Alemania y se puede conducir con el permiso B convencional. Personalmente conducir este coche no me daría mucha seguridad.
La disposición de una ruada delante y dos detrás puede comprometer la estabilidad. Pero aún así, a peores peligros se enfrentan los motoristas y los ciclistas día a día. Con el Twike al menos no te mojas.
El precio del coche varia entre los 17.000 euros y los 32.000 dependiendo de las distintas opciones que escojas, sobre todo del tipo de baterías ya que puedes elegir entre diversas tecnologías existentes según tus necesidades.
