Desde hace algunos meses se ha dado una tendencia en los fabricantes de coches que participan en el campeonato del mundo de resistencia y es la de empezar la hibridación de sus monoplazas. El sistema híbrido que emplean en estos coches es algo semejante al KERS de la Formula Uno: almacena energía en las frenadas y ofrece un aporte extra de energía cuando hace falta.
Hoy en día, dentro del mundillo de la resistencia, los dos fabricantes que más están apostando por esta tendencia son Toyota y Audi. En concreto el coche híbrido del fabricante germano, el Audi R18 E-Tron quedó segundo en la última prueba de las 6 horas de Spa-Francochamps en Bégica solo superado por su homólogo convencinal.
Esta supuesta ventaja que le aporta el KERS a los coches que disponen de el no ha pasado desapercibida para la FIA y los organismos reguladores. Es por ello que con el fin de evitar “injusticias” en la pista se ha decidido que lso coches que dispongan de sistema de tracción híbrido solo puedan emplear la potencia extra que el KERS les ofrece en determinados puntos del circuito.
Si, os suena de algo. En la fórmula uno pasa exactamente igual con los sistemas de DRS que solo se pueden conectar en ciertas partes de los trazados. Regresando a la competición de resistencia, en Le Mans solopodrá activarse el KERS tras las curvas de Dunlop, Forza, Michelin, Mulsanne, Indianapolis, Porsche y Ford.
Vía | Autonblog Green
