No se trata de un platillo rodante, sino que estamos ante un coche movido por energía eléctrica procedente de la transformación de energía solar. Marcelo da Luz ha pasado 28 días recorriendo los 475 kilómetros que separan la ciudad canadiense de Toronto de la capital, Ottawa. No le viene de nuevas. Desde que el Power of one viera la luz en 2002, ha recorrido kilómetros y más kilómetros.
Ideado a partir de una idea que tuvo el inventor en 1999 para competir en el World Solar Challenge, el Power of One - cuyo nombre está en relación con el potencial de cada individuo para fomentar cambios a su alrededor - ha batido sus propias marcas de distancias recorridas en Australia, con 13.055 km, y en Canadá, donde viajó a lo largo de 16.000 kilómetros más.
Así que lo de ahora es un paseo, claro. La salvedad está en que en este caso es Marcelo da Luz quien tira del vehículo, a mano y mientras camina, para concienciar a los canadienses de la necesidad de proteger el medio ambiente. Un poco el mundo al revés, sí, pero todo sea por el medio ambiente.
Evidentemente, todo es cuestión de convicciones. La iniciativa de Marcelo da Luz consiste en darnos un toque de atención a todos. "Si no es ahora, ¿cuándo?", nos pregunta. "Y si no lo hacemos nosotros, ¿quién entonces?", nos reta con un guiño hacia la implicación. Sí, lo de andar arrastrando un vehículo durante casi un mes es un acto de fe que culmina hoy.
De cualquier otra manera, habría terminado el recorrido mucho antes. El vehículo tiene una masa de sólo 250 kg y sus prestaciones no dejan a nadie indiferente. Acelera de 0 a 85 km/h en 6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 120 km/h. A plena luz del sol, su autonomía es de 500 kilómetros; y en horario nocturno, su batería le da energía suficiente como para cubrir 200 kilómetros.
Y es todo producto de una sola persona que creyó en un sueño y se rodeó de un equipo que lo apoyó. Ese es the power of one.
Vía | Autos.ca Vídeo | energiaus (YouTube) Más información | Power of one
