Cuando un coche tiene más éxito del esperado, la oferta no encaja con la demanda. El cliente se tiene que armar de paciencia hasta que le vendan un coche, o irse a la competencia por hartura. Fijémonos en el caso del Chevrolet Volt, que no se vende más por ¡falta de unidades!
Se vende en unos 2.600 concesionarios en 50 estados, y Chevrolet obliga a todos a tener un coche de demostración y exposición (demo car), y no se podían vender. Eso significaba que se podía ir a un concesionario, probarlo, y que luego el comercial dijese "Lo siento, pero es el único que tengo y me impiden vendérselo".
Se acerca el final de año y General Motors quiere llegar a 10.000 unidades vendidas. Pero hay un problema, hay 2.300 coches de demostración... pues la solución es evidente, que se vendan. La empresa está comunicando a sus vendedores que si quieren, se deshagan de sus Volt de prueba, pero han de adquirir otros antes de febrero.
Hasta octubre se han vendido 5.003 Volt, a lo que se sumarían 2.300 coches de concesionario y otros 1.100 que están en camino. Para amortiguar los gastos de depreciación, retirada de pegatinas y demás, GM compensará a sus concesionarios con 1.500 dólares por coche, teniendo que venderlos antes del 3 de enero.
Pese a este movimiento, el Volt sigue teniendo lista de espera, a pesar de su elevado precio y sus solo 40-80 km de autonomía eléctrica. La producción del Volt se puede incluso doblar, pero ahora mismo la demanda es superior a la oferta. ¡Ay!, si hubiesen hecho eso con el "General Motors EV-1":https://www.motorpasionfuturo.com/coches-electricos/gm-ev-1-top-10-de-los-coches-innovadores en su día, en vez de destruirlos, se habrían forrado.
A todo esto, hay que sumar que el Opel Ampera, el mismo coche con logotipos cambiados para Europa, se venderá también, y eso implica más unidades. Se supone que en 2012 la producción de ambos modelos va a aumentar. A ver con qué responde Nissan a esta jugada hasta que puedan fabricar en Estados Unidos localmente.
Fuente | Automotive News