Cada vez son más ciudades españolas las que se plantean, no sólo poner en marcha programas de bicicleta compartida, sino que las bicicletas que lo componen sean eléctricas. San Sebastián, por ejemplo, cuenta con un sistema de bici compartida con bicicletas con asistencia al pedaleo, y en estos momentos, Madrid y Tarragona estudian introducirlas.
Son dos casos diferentes, si bien Madrid pondrá en marcha su programa de bicicleta compartida la próxima primavera, indiferentemente de si se contemplan o no bicicletas eléctricas; Tarragona, por su parte, sólo llevará a cabo la iniciativa si estas lo son.
La propia concejala de movilidad del ayuntamiento afirmó que cualquier opción de que la ciudad implante un sistema de alquiler de bicicletas de uso compartido pasará por que sean eléctricas. De no ser así, no lo ven viable. Tal énfasis por estas se debe a la propia orografía de Tarragona, repleta de repechos, mucho más idóneos para la asistencia al pedaleo. Sería un caso similar al de Edimburgo, que como os contamos, quería poner a rodar de 5.000 bicicletas eléctricas.
En cualquier caso, la aplicación de esta medida todavía es lejana. El ayuntamiento de Tarragona sigue dándole vueltas y valorando los datos de los estudios llevados a cabo, que indican, por ejemplo que el 56% de las vías poseen desniveles pronunciados. Los que sí parece que llegarán allí antes serán los 10 kilómetros de ciclocarriles para facilitar el transporte urbano en bicicleta.
Vía | Bicicletas Eléctricas 365 y Diari de Tarragona En Motorpasión Futuro | Es el momento de la bicicleta compartida, Francia prevé pagar a los que vayan a trabajar en bicicleta 0,21 euros por kilómetro
